San Miguel de Allende, Gto., 18 de septiembre de 2025. — El Gobierno Municipal de San Miguel de Allende aclaró que no tuvo injerencia en el desalojo ocurrido este miércoles en el fraccionamiento Los Frailes, donde fue desalojado el refugio Lucky Dogs Club House, un establecimiento privado de resguardo animal.
De acuerdo con la autoridad local, la acción corresponde a un litigio de carácter jurídico entre particulares, derivado de un proceso testamentario familiar en el que participa una ciudadana identificada como Marissa “N”.
El municipio subrayó que se encuentra impedido para intervenir en este tipo de procedimientos judiciales, y puntualizó que su papel se limitó a brindar acompañamiento a través de la Secretaría de Seguridad Pública, con el objetivo de preservar el orden, garantizar la seguridad de los vecinos y proteger la integridad de las personas y los animales presentes en el lugar.
Asimismo, reiteró su compromiso con el respeto a la ley, el bienestar animal y la seguridad pública en eventos que involucren a la comunidad.
Con este deslinde, la administración municipal enfatizó que el operativo no corresponde a una acción impulsada por el gobierno local, sino a un proceso legal entre particulares.
La pregunta que permanece es: mientras la sociedad civil busca soluciones inmediatas, ¿quién debe asumir la verdadera responsabilidad de lo ocurrido?


